Cuando un chorro de electrones que se mueve a una velocidad cercana a la de la luz pasa por una serie de campos magnéticos alternos, puede liberar una buena parte de su energía en un haz de luz de alta potencia.
Estos “láseres de electrones libres” sirven, entre otras cosas, como bisturíes de alta precisión y para tomar fotos de alta velocidad de átomos y moléculas.
Hace unos años, uno de estos láseres de ultraalta energía produjo un resultado inesperado. Hace unos pocos días, los autores del descubrimienti reportaron la explicación.
Gracias a este fenómeno inesperado acabamos de aprender algo nuevo sobre el funcionamiento del átomo; esto podría ayudarnos a producir tecnología espectacular en los próximos años.